En el vasto y eterno ciclo del cosmos, el calendario egipcio resplandece como un faro de sabiduría ancestral. Hoy, 29 de agosto de 2024, después de la sagrada culminación de los días epagómenos, nos encontramos en un umbral celestial, celebrando el renacimiento del Año Nuevo egipcio. Este día, en el comienzo de la Estación de Sha, un tiempo de renovación y esperanza, marca el inicio del 1 de Thot, el primer mes del ciclo anual en el calendario egipcio.
Los días epagómenos o epagoménicos, que corresponden del 24 al 28 de agosto, son cinco días adicionales al final del año, momentos fuera del tiempo dedicados a los dioses Osiris, Isis, Horus, Seth y Neftis. Estos días simbolizan el caos primordial antes de la creación y ofrecen una pausa mística para la introspección y el renacimiento espiritual, preparándonos para el nuevo ciclo.
En el calendario de la Verdadera Luz de Egipto, este es el Año 3316, un tiempo de profunda conexión con el orden divino del universo. Thot, el dios de la sabiduría y la escritura, abre las puertas a un nuevo ciclo lleno de promesas y revelaciones. En este día, se honra la inmortalidad del tiempo y la renovación que trae la inundación sagrada del Nilo, que fertiliza y transforma la tierra.
Así, al celebrar el Año Nuevo egipcio, nos sumergimos en una danza espiritual con el cosmos, recordando que cada comienzo es una oportunidad para alinear nuestras vidas con la sabiduría ancestral y la luz eterna. Este momento es un regalo del universo, invitándonos a reflexionar, renacer y avanzar con un corazón lleno de esperanza y gratitud.
